La Inteligencia Artificial en el contexto bélico

 La Inteligencia Artificial en el contexto bélico

La aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) en la esfera militar no es un fenómeno reciente, pero ha experimentado un crecimiento significativo que demanda atención, en línea con los avances tecnológicos en el campo de la informática para fines militares. Durante las últimas cinco décadas, el término se ha empleado principalmente en el contexto del desarrollo de software. También ha habido avances notables en armamento inteligente a lo largo del siglo pasado, incluyendo la introducción de sistemas de misiles guiados sin intervención humana y, en casos extremos, el concepto de la «Mano Muerta», una entidad capaz de ordenar un ataque nuclear de represalia si se detecta que quienes tienen el control han fallecido.

Sin embargo, en las décadas más recientes, se ha observado un crecimiento exponencial en la implementación de la IA en sistemas de armamento. Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés), esta tendencia se centra en la mejora de las capacidades militares, lo que potencialmente resulta en armamentos más eficientes, económicos, compactos y autónomos. Entre los ejemplos más notables de esta tendencia se encuentran los drones, utilizados para una amplia gama de aplicaciones militares, así como sistemas de detección y análisis de amenazas.

En el contexto actual, la IA no solo es capaz de evaluar la situación en el campo de batalla, sino que también puede predecir futuros eventos basándose en las acciones del enemigo, e incluso tomar decisiones militares de forma autónoma.

La proliferación de la IA en aplicaciones militares y asuntos relacionados plantea un panorama de seguridad internacional más complejo y peligroso de lo que se conocía en los primeros años de este siglo. La IA tiene el potencial de alterar la dinámica de desencadenamiento de conflictos y guerras, con consecuencias imprevisibles para la supervivencia del planeta. Además, puede llevar a escaladas no deseadas y a consecuencias humanitarias graves, incluso en conflictos entre sistemas de robots. Existe una creciente preocupación sobre el aprovechamiento de estas tecnologías por parte del crimen organizado y el terrorismo.

La IA está provocando una revolución en la esfera militar, transformando los ejércitos, sus inversiones y prioridades. Se ha subrayado la necesidad urgente de abordar y mitigar los riesgos relacionados con la seguridad internacional. Algunos expertos han sugerido la supervisión de los algoritmos para evitar violaciones de los derechos humanos y han destacado la importancia de entablar negociaciones multilaterales.

En la primera Cumbre Global en La Haya sobre IA Responsable en el Ámbito Militar (REAIM), se debatió la posibilidad de prohibir los sistemas autónomos. Sin embargo, el consenso en este tema se mantiene esquivo. Por lo tanto, es crucial ejercer una mayor presión a nivel internacional para fomentar el intercambio de buenas prácticas y promover la adopción de principios éticos en el uso de la IA con fines militares. Argentina debería desempeñar un papel destacado en este incipiente proceso multilateral.