Israel lidera la revolución agrícola con robótica e IA
La escasez de mano de obra en la agricultura, una problemática global en aumento, está desafiando la productividad y eficiencia del sector agropecuario. En Misiones, Argentina, por ejemplo, los productores de cítricos han expresado su preocupación por la falta de recolectores. Ante este desafío urgente, Israel emerge como líder al adoptar una solución innovadora: drones en lugar de trabajadores humanos.
Tevel Aerobotics Technologies, una empresa israelí, ha desarrollado «robots voladores autónomos» que hacen uso de inteligencia artificial (IA) y algoritmos de visión por computadora para recolectar frutas, como manzanas, de manera precisa y delicada. Esta tecnología ya está en uso en Chile.
Estos robots cuentan con una eficiencia sin igual, ofreciendo a los productores una solución versátil y confiable. La recolección se lleva a cabo con meticuloso cuidado para mantener la calidad de la fruta a los más altos estándares. Al automatizar las operaciones agrícolas, estos «robots autónomos voladores» están contribuyendo a reducir los costos de cosecha, mejorar la calidad de la fruta y aumentar los rendimientos. Son únicos en su capacidad para interactuar físicamente con el follaje y volar continuamente dentro y fuera de los árboles sin causar daños.
Según la empresa, el uso de esta tecnología puede reducir los costos totales de un productor entre un 20% y un 30%, además de disminuir las tasas de magulladuras en un 20% gracias a su recolección selectiva y su capacidad para medir la madurez de la fruta.
El sistema funciona mediante un robot montado en una plataforma terrestre que utiliza succión para recolectar cada manzana delicadamente y luego la coloca con cuidado en la plataforma. La visión artificial se emplea para analizar las imágenes de la fruta, determinando no solo su madurez sino también su contenido de azúcar y cualquier enfermedad presente.
Posteriormente, las frutas son depositadas con cuidado para garantizar su calidad óptima y evitar magulladuras. La recolección manual, según la empresa, es una de las principales causas del desperdicio de alimentos frescos debido a las magulladuras evitables.
Múltiples robots trabajan eficientemente lado a lado en las plantaciones, recopilando datos e información en tiempo real sobre cada fruta recolectada. Esta información incluye la cantidad total de fruta recolectada, peso y tamaño de cada fruto, escala de colores, detección de enfermedades, marca de tiempo y geolocalización.
Los algoritmos utilizados incluyen visión (detección de frutas y follaje, clasificación de frutos por tamaño y madurez), percepción de IA (seguimiento de frutas y fusión de datos), maniobra (planificación y ejecución de trayectorias óptimas), equilibrio (estabilización para equilibrar las fuerzas aplicadas sobre el robot por el follaje y la fruta) y optimización de cosecha (gestión de flotas para la cosecha basada en datos del huerto).
La compañía reconoce que el cambio climático y el crecimiento de la población mundial plantean desafíos cada vez mayores para la agricultura. Yanis Maor, fundador y director general de Tevel Aerobotics Technologies, señala que la falta de recolectores es una preocupación creciente. «Cuando miras hacia adelante, es muy claro que habrá cada vez menos gente y, por otro lado, se espera que la cosecha crezca: o sea, más gente, más necesidades. La brecha se está ampliando y aquí es donde entra la robótica».
